Detrás de mi
ventana un universo
frío. No sé
los pasos que me quedan
en este
descampado azul
por donde
peregrino corre el aire.
Nada quiero
saber de tanta saciedad
de ahogos y
naufragios.
Solamente
ambiciono vivir esta mañana
cohabitando
tu música en mis ojos.
Sí. La luz
queda ciega en este instante
mas está
viva.
La
luminosidad dilata los vacíos
de la sierra
y del búho vagabundo.