Los
hombres
son diminutos
puntos,
minúsculas
figuras
que,
cruel y violenta
—religiosa
o laica—,
la estructura
oprime.
Retornan
cabizbajos
al huevo
original
o
piezas son sin norte
que un
frío cuello
de
botella engulle.
Más
hay un
alba —que huye—
de rosas
escondidos, deseados
en este
triste espejo
de
grises, ocres
y
formas dibujado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario